El presente paño constituye un trabajo notable en el arte de la tapicería. Representa un árbol en un bosque no muy tupido. Este árbol se encuentra en primer plano, queriéndonos indicar algo importante. Por eso hay que observar su conjunto, pues es ahí donde encontramos las pistas sobre su significado.

En primer término, diversas variedades de arbustos crecen a la sombra de la abundancia, cerca de las raíces. Hacia nuestra derecha advertimos a una cortesana que tira de un animal de carga. Montados sobre el animal, van unos gemelos, no se sabe muy bien su sexo, uno vestido de negro y el otro ataviado de blanco. El resto de los personajes secundarios son también femeninos, por lo que me atrevo a sugerir que los gemelos son niñas. Con estos elementos vamos a montar el puzzle del simbolismo.

Para la época, la Biblia significaba algo más que el libro sagrado católico, era el libro en el cual Lutero se apoyó para forzar la Contrarreforma. El 31 de octubre de 1517 Lutero expuso en el pórtico de la iglesia de Todos los Santos de Wittenberg sus 95 Tesis. En Bélgica y Holanda (en el siglo XVII un solo país en manos de España) la mayoría de la población es profundamente protestante; por eso son tan importantes los textos bíblicos anteriores a Cristo. En el Antiguo Testamento, capítulo 65 de Isaías, nos encontramos con un fragmento donde se habla del árbol de la vida. (En este capítulo de Isaías, el profeta predice la suerte de los fieles y de los incrédulos). Versículos:
20 “No se verá más allí un niño que viva pocos días, ni anciano que no cumpla el tiempo de su vida; pues el que morirá más niño, tendrá cien años, y el pecador, o el que no viva cien años, será reputado como maldito”.
21 “Y edificarán casas y las habitarán y plantarán viñas y comerán de su fruto”.


22 “No acontecerá que ellos edifiquen y sea otro el que habite; ni plantarán, para que otro sea el que coma; pues los días de mi pueblo serán duraderos como los días del árbol de la vida, y permanecerán largo tiempo las obras de sus manos”.
23 “No se fatigarán en vano mis escogidos, ni tendrán hijos que los conturben17”.

Es la síntesis del cielo, la tierra y el agua. Es el centro del mundo. Representa el lado femenino, la gran madre protectora y a la vez dotada del don de la fecundidad. Por eso los árboles forman anillos en su troncos. Este ejemplar es de hoja caduca, lo que representa una renovación y regeneración constantes, el paso de la vida a la muerte, la resurrección, la reproducción, el principio vital. El árbol de la vida está en el centro y significa regeneración

Los gemelos representan la dualidad entre el bien y el mal, la vida y la muerte, lo bueno y lo malo. Casi siempre están enemistados y se representan uno claro y otro oscuro. En este tapiz la finalidad de su representación es el de la fertilidad. En el siglo XVII, fecha de la realización de este paño, se daba mucha importancia a la procreación y al nacimiento de muchos hijos.

Aunque hay muchas interpretaciones del árbol de la vida, en esta ocasión a diferencia de otras, personifica la abundancia de una época, la barroca, donde todo es recargado, muy abundante y nada recatado. La aparición de varias mujeres en segundo plano es un guiño del artista a la mujer como madre.

La cenefa, toda ella formada de ramos de flores ornamentales, representa la flora que es representativa de Holanda y Bélgica. Vemos tulipanes de muchos colores, rosas, azahar y también gran variedad de frutas. Es un marco representativo de la abundancia que se quiere representar en el interior.